La historia de Farellones se remonta a tiempos ancestrales, cuando el territorio estaba habitado por pueblos prehispánicos, entre ellos los incas, cuya presencia dejó una huella perdurable en la tierra y la cultura regional. Conocida es la historia del niño de Plomo, un ícono de esta época. Estos antiguos habitantes vivían en armonía con el entorno montañoso. Con el tiempo, el área fue habitada por colonizadores y arrieros dedicados a la ganadería. Más tarde, llegaron los pioneros esquiadores, hombres y mujeres valientes que buscaron en las alturas andinas lugares para practicar el esquí, inspirados por lo que habían visto en Europa. Este espíritu de cooperación e innovación sentó las bases para el desarrollo futuro de la zona, creando un legado que aún se respira en cada rincón de Farellones.

En Farellones, la esencia de la amistad y el compromiso con un futuro sostenible se entrelazan en la vida diaria de la comunidad. Aquí, las antiguas familias y los deportistas al aire libre de todo el mundo conviven en armonía, fortaleciendo los lazos de camaradería y solidaridad. Más que un simple destino turístico, Farellones es un hogar acogedor donde se celebran los valores de la amistad y se trabaja en conjunto para preservar el patrimonio natural y cultural. Esta comunidad vibrante mira hacia el futuro con optimismo, comprometida con crear un entorno sostenible para las generaciones que vienen.